En 1307, Domme se convirtió en el lugar de cautiverio de los templarios, en la Porte des Tours, otro alegre Périgord. Además, Domme conserva huellas escritas de este período que se pueden admirar: el famoso Grafiti de los Templarios, realizado por los presos en las paredes de su prisión. Se grabaron siete cuadros, todos vinculados a una iconografía religiosa que aún hoy conserva mucho misterio; Pasando a manos de los ingleses antes de volver a ser posesión francesa, Domme también tuvo que enfrentarse a las jacqueries de los crujientes en 1594 y luego en 1637;

(2 de Julio de 2006)