Este destino lo podrás disfrutar en un día, pero con la variedad de hoteles y restaurantes para todos los gustos no te culpamos si deseas pasar la noche ahí y amanecer con el vaivén del Dordoña, que por cierto antes daba peces y ahora es un espacio ideal para remar. Este pintoresco poblado se encuentra “colgado” al pie de un acantilado, arrinconado entre éste y el río Dordogne, en el departamento de Dordoña. Este pueblo supone el lugar ideal para una escapada con el fin de desconectar ya que su curiosa belleza te atrapa y te envuelve para que olvides todas tus preocupaciones durante tu estancia allí.