La organización de las bastidas sigue siendo la misma, una plaza central rodeada de casas porticadas y una iglesia un poco descentrada (el poder religioso ya estaba perdiendo su influencia) En Saint-Justin, las casas con entramado de madera y las briquetas rojas siguen estando muy presentes y bastante bien cuidadas, a veces sencillas, a veces más ricas como ésta: balcón sostenido por postes ornamentados, vidrieras, tirantes elaborados. Hay varias bastidas en las Landas, algunas mejor conservadas que otras, pero en la más destacable está sin duda la de San Justino: la puerta de Bas Armagnac.

(1 de Julio de 2006)