Una visita al palacete Manoir de Guisson merece mucho la pena, pues es la única manera de ver cómo vivía la burguesía de esa época ya que es la única que se puede visitar por dentro. Sarlat se levantó alrededor de una abadía benedictina fundada en el S VIII, recibe de manos del emperador Carlomagno las reliquias de San Sacerdos y de su madre Santa Mondane. En esa época los abades son todopoderosos hasta el S XIII. En 1317, el Papa Juan XXII proclama a Sarlat como sede episcopal, y la abadía se transforma en Cátedral.

(7 de Julio de 2006)