Casas antiguas, Béziers

La ciudad vivió un auténtico boom económico a finales del siglo XIX y principios del XX, y eso ha dejado huella en una segunda zona histórica en la que las calles estrechas se convirtieron en avenidas más amplias e incluso bulevares, y los edificios modestos dejaron paso a fincas señoriales y hermosas, de un estilo muy francés pero también con toques locales, que efectivamente nos hablan de una burguesía que tenía mucho dinero y, además, quería gastarlo y hacer visible su riqueza. Una Béziers que se encierra en el triángulo que forman la calle de la República, la avenida de Alphonse Mas y el largo paseo dedicado al héroe local: Pierre-Paul Riquet, el genio de cuya cabeza y voluntad nació el Canal du Midi. En esta zona encuentro amplios espacios públicos en los que los indígenas disfrutan del sol del otoño, como el bulevar Jean Jaurés, y plazas algo más recoletas con cafés y restaurantes que a mediados de octubre aún sacan sus sillas a la calle y en los que se come francamente bien por precios bastante razonables. Una de ellas, la del Ayuntamiento, tiene un encanto especial cuando cae la noche y la fachada del consistorio se ilumina de azul blanco y rojo, los colores de la bandera francesa que lucen, se diría, con orgullo republicano.
(10 de Abril de 2009)