Detalle en Fachada y vidrieras, Pézenas

Pézenas ha evolucionado, desarrollado sus atractivos turísticos, preservando al mismo tiempo su autenticidad. A mediados del siglo XIX, mientras Pézenas estaba en su apogeo, su distancia desde el ferrocarril que une Montpellier con Burdeos marcó el comienzo de su declive. Fue una bendición disfrazada, ya que esta lejanía permitió a la ciudad preservar un patrimonio histórico y arquitectónico excepcional. Su centro histórico, y en particular su primer recinto, fue uno de los primeros sectores salvaguardados por la ley de Malraux en 1965. Lo que permitió una restauración cualitativa de numerosas mansiones. Un animal icónico que encarna el espíritu de la ciudad. Es parte de los llamados animales "totémicos", ver "psicopompa".
(9 de Abril de 2009)