Tejados con pizarra, Villefranche-de-Conflent

A finales del siglo XI, el conde de Cerdanya Guillem Ramon Y decidió construir una villa donde confluyen los ríos Tet (Têt), Cady y Rotja para protegerse de las invasiones y desplazar el centro del Conflent que estaba entonces en Cornellà de Conflent. En la nueva ciudad se le concede el título de villa franca, los previlegis de la que incitaron a diferentes oficios como los tejedores, traperos, curtidores, canteros, negociantes... Posteriormente también se le autorizó a hacer un mercado semanal, el único de todo el Conflent. Su ubicación ya era importante en aquella época para la defensa del norte de Cataluña.
(5 de Abril de 2009)