Detalle ventana, Conques

Pero cuando respondió al orden público por unas vidrieras para esta abadía-iglesia, Soulages hizo retroceder deliberadamente "su afectividad ligada a los recuerdos de su infancia" para basar su investigación en "un análisis objetivo de la arquitectura"., cuya relevancia ha sido deliberadamente subrayada por Georges Duby. Si en Conques las ventanas son numerosas -podemos contar 104 para un edificio de tan solo 56 m- es porque el espacio interior debe estar "« inundado de luz " dado que es " el cuadro de la ciudad celeste (...) iluminado por La gloria de Dios " según la expresión del medievalista. Es la luz que sale de las aberturas y evoluciona con la carrera del sol la que da ritmo a este espacio, así como el paso de las horas y las estaciones, convirtiendo la basílica en una «vasta maquinaria para atrapar el tiempo»..
En cuanto a la posible trama de colores de las vidrieras originales que nos permiten suponer el gusto de los monjes de Conques por el brillo de las gemas, nada lo justifica ahora que las paredes del edificio están desnudas, despojadas de cualquier fresco colgante.
(6 de Julio de 2006)