Huida a Belén en la puerta de la Abadía de Saint Pierre, Moissac

En la plástica románica se aprecia una diferencia entre las figuras dominantes que ocupan la posición clave de la composición y que están tratadas de manera hierática y monumental y las figuras pequeñas situadas en espacios secundarios, tratadas con mayor realismo. De ahí el contraste entre el solemne hieratismo del colosal Pantocrátor (ejecutado en relieve plano y frontal) y la expresiva delicadeza gestual de los ancianos (realizados en bulto redondo). ¿Cómo valorar e interpretar la rigidez formal y la tosquedad del modelado?. Se trata de «errores conscientes», pues el artista voluntariamente se aparta de la belleza real para captar la idea de las cosas. De ahí que no quepa la representación del volumen real de los cuerpos, se niegue el espacio tridimensional, así como el sentido de peso y masa. Recordemos que la función principal de la escultura románica no es la de decorar sino la de adoctrinar a un público incapacitado para la lectura bíblica.
(8 de Julio de 2006)