Paisaje desde arriba, Rocamadour

Una leyenda dice que la estatua sería obra de San Amadour, ayudado por San Lucas, porque los sacerdotes del santuario quisieron una de origen muy antiguo, hasta los tiempos apostólicos. Es una estatua esculpida en el siglo XII, que los peregrinos llamaron Santa María de Rocamador, y que los turistas llaman Virgen Negra debido a su tez. En el exterior hay una espada clavada en la roca, de la que se dice que es la Durandal, la espada del héroe Roldán. Nuestra Señora de Rocamadour o de Rocamador es una Virgen Negra de madera, con los ojos cerrados y sedente a modo de trono del Niño Jesús, sentado sobre la rodilla izquierda. Es una Virgen Maiestas Mariae, hierática y ausente. Tanto la madre como el hijo aparecen coronados. Durandarte o Durandal fue la espada de Roldán, paladín y sobrino de Carlomagno. Roldán, también llamado en español Rolando u Orlando, fue un comandante histórico de los francos al servicio de la marca bretona, responsable de defender la frontera de Francia contra los bretones. Murió en la batalla de Roncesvalles a manos de los vascones el 15 de agosto de 778. Su vida se ha convertido en leyenda literaria, notablemente en la materia de Francia. Según la leyenda, Roldán era sobrino de Carlomagno como el supuesto hijo de su hermana, Gisela. La historia de la muerte de Roldán en la batalla de Roncesvalles es relatada en el Cantar de Roldán, un cantar de gesta destacado de la literatura medieval cuyo manuscrito más antiguo data del siglo XI.
(3 de Julio de 2006)