Conjunto de casas medievales, Saint-Cirq-Lapopie

Con tales credenciales se entiende que este maravilloso lugar de unos doscientos habitantes se hiciera más famoso todavía al ser elegido como lugar de residencia por un grupo de artistas surrealistas de la talla de André Breton o del pintor y fotógrafo Man Ray. Para disfrutar de la localidad hay que olvidarse de las prisas y perderse recorriendo sus estrechas y empinadas calles adoquinadas. También hay que buscar los privilegiados miradores que se abren al valle, especialmente el belvédère du Bancourel, colgado del precipicio y desde el que se aprecia una bella y extensa panorámica de los serpenteantes meandros del Lot comprendidos entre la desembocadura del río Célé y el propio Saint-Cirq-Lapopie.
(5 de Julio de 2006)