Malabo: Historia...

Historia

Descubrimiento y conquista portuguesa de la región

En 1472, en su intento por encontrar una nueva ruta hacia las Indias, el navegante portugués Fernando Poo descubrió la isla de Bioko, que llamó "Fermosa". Más tarde la isla fue bautizada con el nombre de su descubridor, Fernando Poo. A principios del siglo XVI, concretamente en 1507, el portugués Ramos de Esquivel realizó un primer intento de colonización europea en la isla de Fernando Poo. Estableció una factoría en Concepción (actual Riaba) y desarrolló las plantaciones de caña de azúcar, pero la hostilidad del autóctono pueblo bubi y las enfermedades pusieron fin rápidamente a esta experiencia.

Con los tratados de San Ildefonso en 1777 y de El Pardo en 1778, durante el reinado del rey español Carlos III los portugueses cedieron a los españoles la isla de Fernando Poo, Annobón y el derecho a realizar comercio en la parte continental, una zona de influencia aproximado de 800 000 km² en África, a cambio de la Colonia del Sacramento en el Río de la Plata y la isla de Santa Catalina frente a las costas brasileñas (ocupadas por los españoles). La zona se extendía desde el delta del Níger hasta la desembocadura del río Ogüé — en el actual Gabón — y comprendía, además de las islas de Fernando Poo y Annobón, los islotes de Corisco y Elobey.

Tras la expedición del Conde de Arjelejos (Brigadier Don Fernando Felipe de los Santos Toro) y el teniente coronel Primo de Rivera, que desembarcó en la actual Luba el 24 de octubre de 1778 para tomar posesión en nombre de Carlos III de España de los Territorios del Golfo de Guinea, a bordo de los buques "Santa Catalina", "Soledad" y el bergantín "Santiago", se vieron fracasadas las diferentes tentativas de colonización por parte de España de estas tierras, quién no dedicó un particular interés en la Guinea Española, y que en 1827 autorizó que los británicos utilizaran la isla como base para la labor de persecución de la trata de esclavos.