Patrona en la iglesia de San Pablo Eremita, Tavira

De las calles junto al río Gilão a las murallas del castillo desde donde se disfruta de la mejor vista de la ciudad, Tavira nos seduce y nos hace querer descubrir sus rincones y desvelar sus secretos. Esta ciudad goza de cierto encanto oriental en sus tejados a dos o cuatro aguas, que se perfilan en el cielo de forma peculiar, y en las puertas de reja hechas de madera entrelazada que resguardan las casas dejando entrar el aire y el sonido, herencia de los árabes que habitaron la región. Tavira se divide entre las dos orillas del río, en una maraña de calles estrechas y casas blancas que apetece recorrer sin prisa. El Jardín de Coreto es la zona más animada, en la que muchas personas pasean saboreando un helado o la frescura del aire, sobre todo por la noche, cuando espectáculos u otros eventos aportan aún más vida a esta zona. Aquí se encuentra el Mercado da Ribeira, que después de abandonar sus funciones originales es, en la actualidad, un espacio de animación y ocio.
(22 de Abril de 2019)