Muro florido, Tavira

Lagos: Aunque se levantaron sobre construcciones anteriores, a esta época pertenecen algunos de los principales monumentos, como el Castillo de los Gobernadores. O las murallas de la ciudad y el Fuerte de Ponta da Bandeira que la protegían de los invasores, sobre todo de los corsarios, y que, actualmente, ofrecen bellas panorámicas sobre la población y el mar. También en Lagos, bajo las arcadas de la Praça Infante D. Henrique, se celebró el primer mercado de esclavos de Europa, espacio ahora transformado en centro cultural con exposiciones y venta de artesanía. Pero hay mucho más que ver. En un recorrido por las calles del centro histórico, si nos fijamos en las canterías de las puertas y ventanas, en los hierros forjados de los balcones y en los patios que proporcionan frescura en verano, descubrimos el encanto de esta ciudad secular. La Iglesia de San Antonio nos sorprende por la riqueza de su interior revestido de talla dorada y azulejos. Como curiosidad, la imagen del santo que le da nombre disfruta del rango de teniente-general, honor obtenido porque este templo sirvió de capilla al Regimiento de Infantería. Al lado, el Museo Municipal cuenta con interesantes núcleos de arqueología y arte sacro.
(22 de Abril de 2019)