Encantadora aldea próxima a la frontera con Fuentes de Oñoro, se llega por la carretera vieja de Guarda, después de parar el río Coa, a pocos kilómetros está el cartel que indica la desviación a esta aldeia, distante de esa carreta poco más de un kilómetro. Encontraremos un aldea con muralla medieval, con viviendas muy interesantes en piedra, alguna con claras muestras de haber sido propiedad de un cristiano nuevo, pues muestra evidentes señas de lo que era característico de las viviendas propiedad de judaizantes, tiene un magnífico pelouriho, una iglesia antigua en el primitivo recinto fortificado en lo alto del pueblo, restos de un castillo, una casa donde estaba el tribunal de justicia, un pequeño museo etnográfico, a la entrada de la población, como se observa en la foto hay dos verracos en piedra característicos de los vetones como los que encontramos en algunas provincias españolas: Salamanca, Ávila, Cáceres, etc. Merece la pena visitar este pueblo. El 13 de mayo, día de la Virgen de Fátima, se celebra una romería a la que acude mucha gente.