Con sus casi 600 metros de longitud, está considerado una auténtica obra de ingeniería en hierro, pesa más de dos toneladas y se asienta sobre nueve pilares de más de 20 metros de profundidad. En 2009, la revista Wallpaper nombró a
Viana do Castelo «la meca de la arquitectura moderna» por sus ambiciosos diseños, como el de la Biblioteca Municipal, obra del portugués Álvaro Siza, o el Centro Cultural, de Eduardo Souto de Moura, ambos galardonados con el prestigioso Premio Pritzker.