Muy cerca de aquí encontramos uno de los secretos mejor guardados de Sarlat: La Fuente de Santa María, situada en la Calle de los Cónsules, frente al hotel Plamon. Al final de esta calle repleta de mansiones de los siglos XIV – XVI, encontramos una pequeña gruta con una fuente natural que fue durante años la única de la ciudad. A partir de esta fuente natural, en el siglo XII se construyó lo que hoy en día podemos ver: una cavidad de 10 metros de alto dentro de la gruta, apuntalada con un arco de piedra y decorada con una imagen de la Virgen María. ¡Pero cuidado! El agua de la fuente no es potable, por lo que se recomienda no beber de ella.