vista del altar Mayor de la Catedral de Saint Nazaire, Béziers

En sus muros están parcialmente cubiertos de frescos antiguos, restaurados en 1917. Estas pinturas tienen un cierto interés artístico, aun cuando fueron severamente dañadas durante las guerras de religión, entonces se cubrieron con una lechada de cal que se despegó a partir de entonces. Estos frescos datan de los siglos XIV y XV. Se aprecian en otras paredes de muchas capillas (la capilla del Espíritu Santo y la Capilla de los Muertos, en particular). Un fresco es una pintura realizada sobre una superficie cubierta con dos capas de mortero de cal, la primera (arricio) de mayor espesor, con cal apagada, arena de río y agua, y la segunda (intonaco) más fina formada por polvo de mármol, cal apagada y agua, sobre la que se van aplicando los pigmentos, cuando todavía esta última capa está húmeda, y por jornadas, de ahí su nombre. Destacan las decoraciones de la Capilla Sixtina hechas por Michelangelo Buonarroti.
(10 de Abril de 2009)