Vista distinta de la escalera de caracol del Hotel de Carrión-nizas, Pézenas

Magníficas casas señoriales, hoteles intactos desde el siglo XVII y calles restauradas, el rico pasado de Pézenas aún hoy deslumbra. Ciudad de ferias, residencia de los gobernadores de la provincia de Languedoc, Pézenas conserva de este prestigioso pasado un rico patrimonio arquitectónico. El cual durante treinta años se ha convertido en un lugar de inspiración y trabajo para los artesanos de arte de excelencia asentados en el año y siempre más numerosos. Su centro histórico conserva el encanto de sus mansiones de los siglos XVII y XVIII, sus calles empedradas y sus numerosas casas burguesas del siglo XVI que sirven de refugio a la Casa Consular, antigua sede del poder municipal. Hubo, hasta mediados del siglo XVII, las reuniones de los Estados del Languedoc. Esta pequeña ciudad (alrededor de 8000 habitantes) llena de historia y que acogió en su seno a los reyes y a la reina de Francia, está llena de hoteles admirables por sus arquitecturas y bellezas
(10 de Abril de 2009)