Vista de la bóveda del piso superior del nártex en la Abadía de Saint Pierre, Moissac

El hecho de convertirse en una abadía cluniacense impulsó su recuperación, tanto económica como espiritual. En 1078 le fue anexado el monasterio de Sant Pere de Camprodon. El 1063 se consagró una nueva iglesia y el 1100 se acabó el claustro. Esta situación de bonanza se prolongó en el tiempo, hasta la mitad del siglo XIV, cuando la Guerra de los Cien Años la afectó. Durante un corto periodo de tiempo dependió la canónica de San Sernin de Toulous En 1466 se independizó de Cluny y pasó a tener abades comendatarios, sin vínculo con el monasterio y con voluntad de beneficiarse de sus rentas. Sufrió los efectos de las Guerras de Religión y de la peste negra. El monasterio fue secularizado en 1626 y pasó a colegiata. Como prácticamente todos los centros monásticos sufrió los efectos de la Revolución y el lugar fue vendido. Afortunadamente las pérdidas fueron menos importantes que las sufridas por otros establecimientos y aún se conserva el claustro y la iglesia, que pronto quedaron protegidos por la administración. La construcción de una vía férrea la afectó en parte. e.
(8 de Julio de 2006)