Detalle de capiteles del claustro de la Basílica Menor de San Trófimo, Arles

De modo que, después de las experiencias griegas y romanas, se diría que se hizo la noche en el campo de la escultura, desapareciendo por completo en el mundo occidental el tipo de obras monumentales que caracterizaron a aquellas culturas mediterráneas. Esto se mantuvo hasta que con el arte Románico, especialmente en territorio francés, comenzó en el siglo XI un proceso evolutivo que culminó en el XII y que abrió la senda a la progresiva eclosión escultórica del arte Gótico.
(7 de Abril de 2009)