Edificio a orillas del río, Tavira

Lagos: Y no podemos dejar de degustar su gastronomía. El pescado y el marisco son los principales ingredientes de diversos majares: de platos con almejas, percebes, huevas o pulpo, de sopas y açordas, o especialidades como el jurel al limón y los calamares rellenos. Los dulces son otra especialidad y entre ellos destacan los dom-rodrigos, receta de las hermanas del Convento de Nuestra Señora del Carmen. Desde la larga Avenida dos Descobrimentos podemos ver el perfil de la ciudad y el puerto deportivo, lleno de vida y animación. Esta vía nos conduce al mar y a las playas, de las más bonitas del Algarve, tantas veces distinguidas por entidades y revistas internacionales. Al este queda Meia Praia, un largo arenal con casi cinco kilómetros que termina en la ría de Alvor. Hacia el otro lado se suceden arenales más pequeños bañados por aguas transparentes, a los que las rocas esculpidas por la erosión aportan una belleza deslumbrante. Así son las playas de Batata, Pinhão, Dona Ana y Camilo, a las que se llega desde el centro de la ciudad. Algo después, Ponta da Piedade, el emblema de la región, es una impresionante formación rocosa con formas recortadas y grutas excavadas que podrá apreciar en todo su esplendor durante un paseo en barco. Canavial, Porto de Mós y Praia da Luz completan esta oferta, que también incluye pequeñas extensiones de arena de difícil acceso, algunas de las cuales solo se pueden alcanzar por mar. Son pequeños paraísos que esperan ser descubiertos.
(22 de Abril de 2019)