En todo Languedoc, Béziers es conocido por dos cosas en particular: el vino y las corridas de toros. Sin duda, la mejor época para visitar esta ciudad, que se asienta sobre un espolón rocoso que domina la gran llanura del departamento de Hérault, es durante la feria de cuatro días. Cuando puedes combinar ambos! Béziers también está perfectamente situado para realizar excursiones en el Haut Languedoc, una región montañosa accidentada e indómita de pintorescos pueblos de piedra y arroyos montañosos en cascada. Aunque esta es una de las ciudades más pequeñas y más pobres de la región, el tiempo aquí rara vez se desperdicia y se deja pasar. El casco antiguo, bordeado por tres lados por el río Orb y un canal, es extremadamente agradable. También vale la pena señalar que Béziers está fuera de la mayoría de las agendas turísticas, por lo que si está buscando un sabor del verdadero Languedoc, podría hacerlo peor que pasar una o dos noches aquí.

(10 de Abril de 2009)