Detalle del claustro de la Basílica Menor de San Trófimo, Arles

La primitiva catedral de Arlés se comenzó a levantar en el siglo V en el lugar en que se encuentra, siendo mencionada en tiempos del obispo san Hilario (429-449) bajo la advocación de San Esteban. En el año 972 fueron trasladadas a ella las reliquias de San Trófimo, que había sido enterrado en el cementerio de Les Alyscamps, cuya devoción popular originó el cambio de advocación del templo por la del santo obispo de Arlés. Entre los siglos X y XI la iglesia fue paulatinamente renovada, realizándose en 1152 la solemne colocación de las reliquias de San Trófimo en su interior y el cambio oficial de advocación.
(7 de Abril de 2009)